
García desapareció unos instantes con la excusa de ir al lavabo. Dada la inteligencia de Karsels, estaba seguro de que su próximo truco funcionaría muy bien. Se dirigió a la cocina y dio unas órdenes muy sencillas al cocinero, un cheff nativo de Níger que lo miró algo extrañado pero de inmediato se puso manos a la obra.
García volvió con Karsels, que le estaba esperando con la probeta en la mano.
- Karsels, amigo.
- Dime García.
- Ven, te voy a enseñar la nevera nuclear secreta.
- Oh, qué ilusión.
García llevó a Karsels a la cocina. La cocina era normal, grande, pero normal. En ella trabajaban 2 personas, el cocinero y su ayudante, los dos nativos. Eran grandes expertos en carnes. La cocina tenía dos enormes picas para fregar, un lavavajillas industrial, muchos armarios, un pequeño cuarto aparte que funcionaba a modo de despensa, 2 hornos microondos y 2 hornos normales y unos cuantos fogones. En un rincón había una nevera de doble puerta, blanca. En la puerta, y enganchado con un imán que representaba un negrito correteando desnudo, había un papel que parecía haber sido puesto ahí apresuradamente, pues estaba torcido. Ponía, escrito en con un rotulador negro, "N'ebera N'clear Secrehta".
- Oooooooh- exclamó Karsels.- Qué grande!! Y es nuclear, lo pone ahí.
- Sí, sí, completamente nuclear. Y secreta.
- Pero si es secreta porque está en la cocina?? Seguro que el cocinero la conoce!!
- No, no, no es un cocinero, es un Ingeniero de Nevera Nuclear.
- Ah. Y los Ingenieros de Neveras Nucleares pelan patatas y hacen tortillas?
- Claro. Karsels, me estás obligando a revelarte información confidencial, eh? Verás, estas tortillas... son nucleares.- García dijo estas últimas palabras susurrando al oído de Karsels.
- Qué fuerte!!! Pero qué fuerte!!! No tanto como que estés casado, pero casi, eh?
- Sí, sí. Pero no se lo digas a nadie, eh?
- No, no.
- Anda dame la probeta que la pondremos en la nevera.
García abrió la nevera. En su interior habían paquetes de embutido, yogures, algunos filetes, leche, un par de botellas de agua, fruta diversa... García se volvió a acercar al oído de Karsels:
- Es todo nuclear... hasta los plátanos, todo nuclear. Y secreto!!
- Ooooooh.
- Mira, dejaré aquí tu probeta preciosa.
- Podré venir a verla?
- Siempre que avises antes, amigo.
1 comentario:
la historia esta tomando un aire muy secreto para un ser tan "simple" como Munyonys. Su edad mental es de 7 años pero es un super-hombre, capaz de sobrevivir a un manotazo q lo desplaza 3000 km, o sobrevivir dias sin comer ni beber, debido a su privilegiado fisico.
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